Esta es una herramienta que destaca por su sencillez de uso y sobre todo efectividad que es de lo que se trata. Como bien comenta Xavier no es la solucion definitiva pero si una más.
La idea es simple, puede que en ocasiones quieras mantener algún archivo ejecutable (o portable) lejos de accesos ajenos.
Pues bien con Empathy podrás hacerlo de un modo muy sencillo generando una contraseña para ejecutar el archivo en cuestión (.exe). Sobra decir que si olvidas el password asignado, el archivo quedará inutilizado para su uso.
Una vez protegido con Empathy, la única forma de usarlo será introduciendo el password previamente asignado. Además, si ese programa se copia a otro equipo, la protección se mantiene.
Puede que ese otro equipo tenga instalada otra versión de Windows, no hay problema, un programa protegido con Empathy puede funcionar indistintamente en Windows NT 3.51, Windows NT 4, Windows 2000, Windows XP, Windows Server 2003, Windows Vista, Windows 95, Windows 98 o Windows Millennium.
Por cierto, la licencia es de lo más «empática», concrétamente se trata de «postcardware», el autor informa de que el uso de Empathy es gratuito por un periodo ilimitado pero si se quiere usar con todas sus funcionalidades hay que mandarle una postal por correo tradicional y cuando le llegue , su autor manda una licencia vía e-mail al remitente -;).
Acceso al sitio web de «Empathy» (Inglés) | Traducido vía Google.
¿Quieres comentar algo sobre este post? Puedes hacerlo en nuestro foro de noticias